Es un alimento tradicional de la cocina árabe y consiste en una bola aplanada frita cuyo ingrediente principal es el garbanzo. Se consume envuelto en pan árabe tradicional (un pan aplanado) acompañado de ensalada con alguna salsa. A nosotros en casa nos encanta con la ensalada con Tahina: los sabores a especias, hortalizas frescas, hierbabuena y crema de sésamo (tahina) le dan su carácter personal y único a este plato.
1cda soperade cilantro molido o un manojo de cilantro fresco
2cdas soperasde sal
Elaboración paso a paso
Escurrimos los garbanzos que habremos puesto a remojo la noche anterior.Necesitamos una picadora potente, si no la tenemos, utilizar las medidas para medio kilo de garbanzos para que no os lleve demasiado tiempo.
Troceamos la cebolla, el pimiento y los dientes de ajo. Lavamos y secamos nuestro ramillete de perejil y lo vamos picando junto con una porción de garbanzos con pimiento, cebolla y ajo.El nivel de picado no tiene que ser demasiado grueso, pero tampoco hay que dejarlo muy fino, os muestro una foto para que aprecies el punto ideal de picado.
Una vez picados los ingredientes toca incorporar las especias, la sal y la levadura. Amasamos todo para que se unifiquen bien los sabores.
Formamos unas bolitas un pelín aplastadas, ya que si las hacemos muy redondeadas tipo "albondiga" corremos el riesgo de que nos queden crudos por dentro.
Calentamos aceite de oliva o de girasol en una sartén un poco honda, calcula la cantidad para que las bolitas queden casi cubiertas. Una vez caliente las hacemos a fuego medio, no demasiado alto para evitar que se doren demasiado y queden crudos por dentro. Cuando estén bien dorados los sacamos a papel de cocina para evitar el exceso de aceite de la fritura.
Notas
Ya esta listo nuestro falafel!!Las proporciones que os hemos dado son para un kilo porque nosotras lo congelamos y así lo tenemos a mano para cuando tenemos visita o para cuando queremos hacernos una comida rápida porque no disponemos de tiempo para cocinar.